Todos y todas las que hemos estudiado, sabemos lo gratificante que es comenzar esta etapa de estudiante con todas las ganas e ilusión del mundo, y con los años lograr finalizarlos. Se pasan momentos díficiles, de desánimos, divertidos, de risas, nervios...pero se convierten en años imposibles de olvidar, y con un resultado muy gratificante: trabajar en lo que deseas.
Este ha sido el caso de Almudena, una chica que acaba de terminar sus estudios de medicina, y a la cual en un futuro cercano, le encantaría ser una gran pediatra. Con esfuerzo, vocación y constancia, nosotras no dudamos que lo conseguirás.
Su hermana Rocío y su familia quisieron sorprenderla y compensar todo el esfuerzo que ha hecho en estos años de esta manera. Ellos han sido su apoyo...y lo continuarán siendo durante muchos años...
El bizcocho era de buttermilk y relleno de nata con nutella...Sabemos que les encantó, porque así nos lo hicieron saber.
Gracias Rocío por confiar en nosotras...Y mucha suerte para Almudena en su nueva andadura...
Que bonita y original. Besitos.
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